Amistad, Alegría y Amor son las tres
palabras que se me vienen a la cabeza cuando recuerdo la visita de
las Reliquias de San Juan Bosco a Carmona.
Amistad, es la primera de las primeras
palabras que recuerdo de la visita, y porque, la respuesta es muy
simple, porque ese día lo pase con mis amigos del colegio o de clase
y también con amigos que no son del colegio, pero conocen muy bien
el espíritu Salesianos que transmitió Don Bosco. Aunque muchos de
los Alumnos digais que es mentira lo que voy a decir pero la amistad
lo podemos encontrar en los profesores, hasta en Don Antonio, ellos
tienen una forma de educar muy distinta a la que estamos
acostumbrados a ver en otros colegios, ellos no nos educan como
profesores sino como amigos, amigos de los alumnos.
Otra palabra que se me viene a la
cabeza es alegría, alegría porque yo, mis amigos, profesores,
Salesianos que nos acompañaron como Anselmo y antiguos alumnos,
pasaron ese día con los suyos, sus amigos, compañeros y familiares.
También ese mismo día se noto la fe salesiana que hay en Carmona.
Como decía la noticia que se escribió en la página web de los
Salesianos de Sevilla "Un Retumbar de Corazones", porque
Carmona aunque sea una ciudad pequeña, tienen muchos corazones
Salesianos. También, a parte de ese día, las semanas anteriores a
la visita de San Juan Bosco a Carmona estuvimos preparando el
colegio, los pasillos, las clases,... Pero no fue lo único, también
hicimos un teatro el día de la visita, que por lo que ví, le gustó
a los alumnosy también a los padre y madres que no acompañaron ese
gran día.
Amor es una de las tres palabras que se
me vienen a la cabeza, porque el ambiente que hubo ese día era de
amor a Don Bosco, pero nosotros lo definiriamos mejor como Padre,
Maestro y amigo de la Juventud. El espíritu de Don Bosco no solo se
vive en Carmona sino en todas las ciudades y pueblos Salesianos del
mundo porque todo esto comenzó con una persona y hoy en día ya
somos muchos jóvenes y padres Salesianos en el mundo.
Yo creo que las Reliquias de San Juan
Bosco cuando se pasa por cada colegio Salesianos deja a cada persona
una especie de mision o propósito. Por ejemplo mi propósito que,
creo yo, me dejó Don Bosco es que los niños y niñas, también los
jóvenes, disfrutanran conmigo y la mejor forma de hacerlo es estando
con ellos, siendo su amigo y compañero, y de momento se está
cumpliendo. Como decía Don Bosco, Os Amo porque sois Jóvenes.
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